¡Madre mía, lo tarde que es y aún no le he echado de comer a mi blog! Ahora entiendo por qué se me ha echado encima cuando he llegado a casa y ha comenzado a mordisquearme los bajos de los pantalones. ¡Sapristi, son los pantalones buenos! ¿Qué, a que tú tampoco oías «sapristi» desde los tebeos de Zipi y Zape?
En fin, hoy ha sido un día largo y estoy muertita pero aún así he sacado fuerzas de flaqueza y tiempo de donde no lo había para comenzar a corregir por enésima vez la novela. No lo entiendo, la leo con atención, encuentro erratas, gazapos, repeticiones innecesarias, errores de estilo, un vestido que no conjunta con el lazo del pelo… Y lo corrijo todo. Y cuando vuelvo a leerlo todavía encuentro erratas, gazapos, repeticiones innecesarias, errores de estilo y zurrones que no pegan con los botines. ¿Es que no hay manera de que quede perfecto? ¿Cómo puede ser que todavía se me pasen errores? ¿Es que la roña de las antiparras no me deja ver las haches intercaladas (me quito las gafas, miro los cristales con ojo crítico y encuentro que el nivel de esmerilado es aceptable)? ¿Esto sólo me pasa a mí o es normal? ¿Por qué Supermán, si es tan listo, lleva los calzoncillos por encima de los pantalones?
Y no me digas que pase el corrector ortográfico, que estamos a unos niveles que ya no discierne, el pobre. ¿Qué sabe el corrector, si voy al este o voy con éste? ¡Lo que necesito es otro par de antiparras!
Vanessa, la teva novel · la i els teus relats curts, són bons però … Els teus comentaris (ex. el d’avui, corrector ortopèdic) són d’allò més original i divertit.
Personalment, m’ho passo de meravella.
Crec que poden arribar a ser «addictius». des que tens el bloc, és el primer que busco quan entro a Facebook.
Per cert, ja estic al cap. 5, jeje.
¡Grande Requena! Buenafuente a tus pies. El rato más divertido del día. Quiero MÁS
Gracias por perder un ratito con el blog, me alegra que os guste!!!