Me encanta escribir estos posts porque nadie me replica en medio de mi exposición (en la vida real nadie me deja ir más allá de la tercera frase sin poner pegas chorras como “no es verdad que te fueras de vacaciones a Marte el año pasado” o “sólo has sido modelo de uñas comidas”. ¡Aguafiestas!).
En fin, hoy te voy a contar un secreto que me acabo de inventar… No sé si los conceptos “secreto” y “acabado de inventar” son compatibles pero ahí lo dejo, así empezó Ferrán Adrià y échale un galgo (incluso podría ganar “Masterchef”). Acércate a la pantalla, que lo escribo en voz baja (otro concepto gilipoideo). Allá voy…
Los ojetes son portales dimensionales que conducen a lugares oscuros y horripilantes en realidades paralelas. Entre tú y yo, al otro lado hay universos de mierda. Si tu vida es una mierda puede que hayas pasado accidentalmente por un ojete sin darte cuenta (aunque no sé cómo puede pasar eso “sin darse un@ cuenta”) y estés en la Mierra. Ah, y ya puedes dejar de intentar pasar sondas con mensajes al otro lado porque el portal es unidireccional para sondas (no, sondas vibradoras tampoco sirven). Ni longaniiiiiizas. Ni paraguas… ¡no, abiertos tampoco!
Y ya está, no tengo más material para el post de hoy a menos que me espere a recibir un mensaje cifrado encerrado en un cagarufo del otro lado y hagamos debate y mesa redonda al respecto (poco recomendable y se acerca la hora de cenar). Por eso voy a divagar sobre mi pareja, que odia que le llame “mi pareja” porque dice que suena a igualdad y que él sostiene que me compró por dos camellos y una cabra.
Em… Vamos a dejar a mi pareja tranquilo, que se le ha erizado el flequillo como a un canario en pie de guerra en cuanto me ha leído por encima del hombro (¡jamás debí enseñarle!) y me da un poco de miedo, que el morlaco tiene unos abdominales como la abeja Maya (¿mal ejemplo, cielito…? ¿Por qué tienes los ojos inyectados en sangre?).
Finisterre.
Al otro lado de las llamas 
¿y no se puede crear un agujero de gusano para salir del universo de mierda e irse a alguno menos pedorro? A lo mejor Chuck Norris de una patada voladora puede abrir el vórtice… Me gusta pensar que la teoría del multiverso es cierta, ya sabes, entre infinitos universos paralelos debe haber un yo, exacto a mi yo presente, pero que llegue a fin de mes.
La última vez que Chuck Norris dio una patada voladora se le escapó un pedo y se extinguieron los dinosaurios, así que ten cuidado con lo que deseas…
A mí esto del multiverso, de que si hubiera hecho otra cosa mi vida sería distinta… Me ralla un montón. A lo hecho, pecho!!! Y a final de mes llegamos cocinando los pelillos de los puerros.